Asignar presupuesto fijo semanal para los gastos

Vamos con la primera idea. Cuando no tenemos un presupuesto fijo, solemos ir gastando sin medida ni control, y podemos llevarnos la sorpresa de que en la tercera semana del mes, ya no tengamos dinero. Bien, lo ideal es fijar un presupuesto semanal, es decir, repartir el dinero que tengamos de un mes, entre sus semanas. Si en la primera semana nos pasamos de ese presupuesto, lo tenemos en cuenta para la siguiente ir más ajustados aún. Si por el contrario, nos sobra algo, lo vamos a guardar aparte hasta que llegue la última semana. Así hasta fin de mes, porque es en la última en la que nos podemos ver más apurados. Si ese fuera el caso, tiraríamos de nuestros ahorros de las semanas anteriores.

Bueno, nada es fácil en esto de la crisis y la falta de dinero a fin de mes, pero poco a poco, detalle a detalle, vamos a ir consiguiendo unos resultados económicos que nos ayuden a ir mejor.
Ponedlo en práctica y nos contáis vuestra opinión.